La carga digital de las infraestructuras sanitarias exige capacidades 5G
Los dispositivos sanitarios con conectividad Wi-Fi 6 y 5G deberían convertirse en un estándar en centros de salud y hospitales.
Zebra Technologies, proveedor líder de soluciones digitales que permite a las empresas conectar de forma inteligente datos, activos y personas, afirma que en estos momentos se está despertando en las industrias un interés real por el 5G, el cual en un inicio impulsó al consumidor doméstico que buscaba principalmente entrenamiento.
La sanidad es uno de estos sectores que, gracias a la red móvil de mayor velocidad, está generalizando el uso de la telemedicina, la monitorización y la atención a distancia de pacientes. Puede facilitar el apoyo a enfermeros y médicos que realizan visitas a domicilio para transmitir por vídeo la opinión de un experto, o asistir al personal de ambulancias en el lugar mismo de un accidente, incluso para intervenciones quirúrgicas cuando los cirujanos especialistas o el paciente no pueden trasladarse.
"A medida que las operaciones hospitalarias se digitalizan, es esencial disponer de redes inalámbricas que puedan soportar la carga de robots, sensores, soluciones de localización y otras tecnologías conectadas, basadas en el Internet de las cosas (IoT) e inteligencia artificial (IA)", apunta Lorna Hopkin, Healthcare Solutions Specialist de Zebra Technologies EMEA. "La carga de las redes aumentará en el futuro como consecuencia del cruce de información de pacientes de cualquier lugar del mundo con infinidad de estadísticas para predecir resultados y ofrecer planes de atención personalizados".
Existen robots que realizan neurocirugías guiados por un cirujano que se encuentra en otro continente y que controlan la temperatura de sus pacientes. Asimismo, las consultas de telesalud durante cirugías virtuales se enriquecen con datos añadidos de dispositivos portátiles que transmiten las constantes vitales del paciente a profesionales dentro y fuera del quirófano en tiempo real. Los wearables orientan los programas de fisioterapia, alertan a enfermeros en caso de caída de un paciente y realizan con más fiabilidad el seguimiento de pacientes crónicos, como los diabéticos.
"Los dispositivos sanitarios de alta calidad con conectividad Wi-Fi 6 y 5G deberían convertirse en un estándar en centros de salud y hospitales. La telesalud ha aumentado la comodidad y la conveniencia de la atención al paciente. Ya no es necesario acudir a un hospital o una clínica para pedir cita, ni para renovar una receta o ser remitido a un especialista —sostiene Hopkin—. La tecnología lo ha hecho posible. Hace poco, el director de un hospital me comentó que utilizaba ordenadores portátiles de nivel empresarial para conectar a los pacientes con sus familiares. Sólo en su primer año se realizaron más de 14.000 videollamadas".
Es hora de que el 5G se una al Wi-Fi
Lorna Hopkin se pregunta qué ocurrirá si seguimos sometiendo a las redes Wi-Fi a tan alta demanda. Están sobrecargadas por el creciente número de móviles conectados, ordenadores clínicos y tabletas. "No podemos poner todos los huevos en la misma cesta. Lo ideal sería que todo el sector sanitario hablara de 5G y de lo que va a costar migrar sus sistemas a redes 5G dentro y fuera de las cuatro paredes", defiende Lorna Hopkin.
Con velocidades 100 veces más rápidas que 4G y una latencia ultra baja, el 5G tiene la capacidad de gestionar muchas más conexiones sin flaquear. Desde la óptica de Zebra, el 5G es imprescindible para el volumen y la sensibilidad de los nuevos datos de prestación de asistencia sanitaria; es un facilitador y catalizador de mejores resultados.
La compañía es consciente de las barreras que supone para la implantación del 5G que en muchas partes del mundo sigan utilizando 3G y no puedan acceder aún a redes 5G. Además, los responsables sanitarios han realizado grandes inversiones en infraestructuras Wi-Fi que no van a sustituir a medio plazo. Desde Zebra no plantean 5G como un elemento de acción inminente, sino como un tema de debate urgente.
Poner en marcha una red móvil que pueda ser controlada totalmente en las instalaciones del centro va a ser más sencillo de lo que se cree. Los CIO no tendrán que sustituir nada, ya que funcionará en combinación con sus redes Wi-Fi, que podrían reservarse para uso de pacientes y familiares, mientras que el acceso a la red inalámbrica privada podría priorizarse para comunicaciones internas, telemedicina, cirugías robóticas, salas virtuales y monitorización de pacientes, entre otros usos.
"La pandemia aceleró la adopción de tecnología sanitaria a un ritmo sin precedentes y, parece, que esta tendencia continuará. A medida que la atención sanitaria sea cada vez más sofisticada, tanto dentro como fuera de los hospitales, aumentará la carga de nuestra infraestructura digital. Los responsables de las instituciones sanitarias deberían considerar los dispositivos habilitados para 5G como un elemento imprescindible de la asistencia al paciente", concluye Hopkin.