Las empresas cumplen con el registro de la jornada laboral, pero desaprovechan la digitalización que conlleva
El primer paso se ha dado. Tras la reforma del artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores, miles de empresas registran cada día la jornada laboral de sus trabajadores. Una medida legal obligatoria desde mayo de 2019 que puede acarrear sanciones de entre 626 y 187.000 euros para las compañías que infrinjan alguna de sus obligaciones.