AMETIC considera insuficiente la partida de los PGE destinada a la transformación digital y el sector TIC
AMETIC, la patronal del sector de la industria tecnológica digital en España, considera que la apuesta del Gobierno de España por el sector digital es insuficiente, según se extrae del proyecto de Presupuestos Generales del Estado, PGE, para 2019 presentado el pasado 14 de enero.
En conjunto, el sector TIC y digital, que se configura como una de las grandes palancas de cambio de la economía, cuenta con un presupuesto efectivo escaso. Asimismo, las políticas de industria y energía tampoco dan respuesta al esfuerzo necesario para impulsar la digitalización.
Del análisis realizado por la asociación, enfocado en las partidas que más directamente afectan a la transformación digital y el sector TIC: la I+D+i en su conjunto, las políticas específicas de impulso digital (agenda digital y sociedad de la información) e industria, se desprende que, aunque las cifras de I+D+i se han anunciado con optimismo, quedan muy por debajo del esfuerzo necesario para aproximar a España a la media europea.
Apuesta moderada por la Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i)
Según el Libro Amarillo del proyecto de PGE para 2019, se aprecia un incremento de 357 millones de euros de las partidas destinadas a actuaciones de I+D+i civil, hasta los 6.729 millones. Esta cifra supone un aumento del 5,6% respecto al año anterior, estando por encima del crecimiento del PIB español en 2018, situado en torno al 2,6%. Respecto a la Política de Gasto dedicada a I+D+i en su conjunto, la cifra asciende a 7.425 millones de euros, un 5,14% más que el pasado año. En el contexto actual de presupuestos expansivos que incrementan el gasto total un 5,1% con respecto a 2018, la apuesta por la I+D+i es moderada y se mantiene en la misma línea del incremento global de los PGE.
El gasto en España en I+D+i representa solo un 1,19% del PIB, por lo que se requiere una apuesta más decidida para alcanzar a corto plazo el objetivo del 2% del PIB o el de la media europea, que se sitúa en el 2,03%. En este sentido, la inversión en I+D+i necesita de un impulso adicional dada su relevancia estratégica para el desarrollo de la economía en su conjunto y para alcanzar los niveles de digitalización de la media europea.
Aunque la partida de créditos no financieros (subvenciones) recibe un mayor impulso que la dedicada a créditos financieros (préstamos), se continúa otorgando mayor protagonismo a las fórmulas de préstamos para la realización de I+D+i (3.884 millones de € frente a 2.845 millones de €), lo que dificulta el diseño de unos instrumentos adecuados de apoyo a la I+D+i empresarial.
Asimismo, preocupan las medidas apuntadas sobre el Impuesto de Sociedades (IS) relativas a fiscalidad. La creación de un tipo mínimo del IS puede poner en peligro el sistema de deducciones fiscales a la I+D+i tan necesario para las empresas innovadoras.
Insuficientes las partidas dedicadas al impulso digital
A la vista del proyecto de PGE para 2019, se aprecia una escasa relevancia para el Gobierno del ámbito digital, lo que se traduce en una cuantía económica insuficiente de las partidas dedicadas al impulso digital. En ese sentido, el presupuesto destinadas a promover la modernización digital de España es prácticamente el mismo que años atrás, evidenciando una falta de dinamismo o escasez de programas innovadores de impulso, que tengan un impacto real en la economía y la sociedad. Asimismo, cabe destacar que sigue sin conocerse el detalle del proyecto del Gobierno en materia de impulso digital.
El “Presupuesto de Impulso Digital” de los PGE para 2019 asciende a un total de 772,69 millones de euros, una cifra que resulta insuficiente para acometer la transformación digital que requiere España, así como para el papel que debe tener la tecnología en la economía y el alineamiento de la política digital con las directrices europea.
Compromiso con el sector industrial y energético
El proyecto de Presupuestos refleja la apuesta del Gobierno por aumentar el grado de innovación tecnológica y digitalización de la industria, en aras de conseguir el objetivo del 20% del PIB definido en la estrategia 2020. De esta forma, la política de Industria y Energía contará en 2019 con unos recursos de 5.803 millones de euros, lo que implica un incremento del 0,5% respecto a 2018, aunque queda por debajo del crecimiento del PIB. Aunque se trata de una política amplia, se requeriría mayor detalle para determinar específicamente el presupuesto destinado a la política industrial, ya que en él se incluyen conceptos que promueven la sostenibilidad energética, medioambiental o la movilidad.
En lo que respecta a la reindustrialización de la economía, tiene un papel estratégico el “Programa de Apoyo a la Inversión Industrial Productiva”, para el que se destinarán 818 millones de euros en 2019 en forma de préstamos. Con respecto a Comercio, Turismo y PYME, el “Programa de Apoyo a la Pequeña y Mediana empresa”, gestionará este año unos recursos por importe total de 145 millones de euros. No obstante, en la propuesta no se observa una apuesta por otras nuevas fórmulas o programas más allá de los préstamos, como pueden ser la hiperamortización, las desgravaciones fiscales por adopción de tecnología en los procesos productivos o la puesta en marcha de programas de ayudas que incentiven proyectos pilotos entre empresas tractoras y PYMEs, lo que permitiría el verdadero despliegue de la Industria 4.0.
Soluciones globales para cuestiones globales
El Gobierno prevé que la recaudación tributaria en 2019 alcance los 227.356 millones de euros, según las previsiones, que incluyen los impuestos ya existentes como el IRPF, IVA o IS, y también los nuevos impuestos diseñados por el Ejecutivo, entre los que figuran la tasa a las transacciones financieras y el impuesto a determinados servicios digitales. Respecto a la ‘Tasa Digital’, AMETIC considera que las soluciones a las distorsiones competitivas actuales en la economía deben abordarse desde un debate a nivel internacional, que garantice un sistema impositivo global, moderno, justo y eficiente.
Por ello, este tipo de acciones deben realizarse en el seno de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), foro donde los gobiernos pueden trabajar conjuntamente para compartir experiencias y buscar soluciones a los problemas comunes. De este modo, el acuerdo en el seno de la OCDE garantiza la seguridad jurídica, al ser los propios Estados los que han consensuado un sistema impositivo que grave los beneficios corporativos a nivel internacional de manera sostenible a largo plazo.
Proyectos tractores de País y plan de choque de formación y reciclaje ausentes
Desde AMETIC, echamos en falta la presencia en los PGE de proyectos tractores de País, en línea con la innovación por misiones escogida por la UE en su propuesta de próximo Programa Marco. Estos proyectos tractores son imprescindibles para el impulso de la industria digital, y su papel necesario en la creación de empleo de calidad en el futuro.
Asimismo echamos en falta una Acción Estratégica Nacional para la fomento, formación y reciclaje de habilidades digitales, imprescindibles para el mantenimiento de la empleabilidad de la población y su participación en las nuevas oportunidades laborales de futuro.