23 municipios baleares no tienen un acceso a Internet de calidad
En las Islas Baleares hay 23 municipios donde no existen infraestructuras capaces de ofrecer un servicio de acceso a Internet mínimo de 1 Mbps.
En ellos viven alrededor de 2.000 ciudadanos que no tienen ningún tipo de cobertura, por cable o móvil, de acceso a Internet, según un estudio realizado por la operadora de servicios por satélite Quantis utilizando datos del Plan Avanza y del INE.
El estudio identifica los municipios de menos de 20.000 habitantes donde no existen actualmente infraestructuras terrestres para proporcionar un servicio mínimo de 1 Mbps, ni planes para su despliegue a corto plazo por parte de ningún operador.
Según el informe de Cobertura de Banda Ancha en España en el primer Trimestre de 2014, elaborado por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, la tecnología con más cobertura es la UMTS con HSPA -3G-, presente en el 99% del territorio. “Este dato –señala Aquilino Antuña, director general de Quantis- no supone que todos los ciudadanos tengan cobertura ni que ésta sea buena. El acceso móvil a Internet deja muchas zonas en blanco y además, el uso intensivo del los dispositivos móviles satura rápidamente la capacidad disponible en las redes móviles, creando situaciones donde la navegación es frustrante”.
Según Aquilino Antuña, la realidad es que hay miles de ciudadanos totalmente desconectados. “Ciudadanos que en su mayoría se localizan en zonas con escasa densidad de población o de difícil acceso, donde la cobertura de las grandes operadoras no supera en ningún caso el 10 por ciento, ni la superará, por no ser rentable”. Zonas de las Islas Baleares donde también hay numerosas empresas, en su mayoría pymes, que ven dificultad en su actividad empresarial por la ausencia de unas comunicaciones vitales para el negocio.
Municipios en blanco
El “ranking” de municipios “en blanco” lo encabezan Sant Lluis, con 700 ciudadanos desconectados, Selva y Valldemossa, con algo más de 200, y Mao, que roza los 150. Las zonas “en blanco” existen en todas las provincias e incluyen polígonos industriales, zonas suburbanas y municipios de tamaño medio donde las conexiones de banda ancha tienen escasa calidad o simplemente no existen. Por comunidades, la lista de “ciudadanos desconectados” la encabeza Galicia, Castilla y León, Andalucía y Asturias. En paralelo, sólo un 60% de los hogares españoles navega por encima de los 30 Mbps.
La tecnología con más cobertura es la UMTS con HSPA -3G-, presente en el 99% del territorio, sin embargo este servicio es muy irregular, especialmente en zonas rurales donde la navegación no siempre es fácil. Le sigue el ADSL de hasta 2 Mbps, con un 89% de cobertura, y el ADSL de hasta 10 Mbps, con el 69% de cobertura. En cuanto a las velocidades, según el informe, el 95% de la población puede disfrutar de velocidades de hasta 2 Mbps, el 82% de hasta 10 Mbps, el 60% de hasta 30 Mbps y solo un 58% de hasta 100 Mbps. Estas velocidades son las nominales y, en la práctica, la velocidad real en el ADSL es de un 20% de la nominal.
“La realidad es más prosaica –indica Aquilino Antuña, director general de Quantis-, ya que puedes vivir entre dos vecinos que navegan a alta velocidad y tú tener problemas para acceder a Internet”. La Ley 9/2014, de 9 de mayo, General de Telecomunicaciones, incorpora en su disposición adicional decimoctava, el objetivo de lograr la universalización del acceso a Internet a 10 Mbps en 2017 y a 30 Mbps en 2020, además de conseguir en dicho año que al menos el 50% de los hogares puedan disponer de acceso a servicios de velocidades superiores a 100 Mbps. “El problema es que -continúa Antuña- si no cambian las cosas, en 2020 seguirán existiendo hogares sin Internet”.
Para Aquilino Antuña, la solución está en el satélite “porque el cielo ofrece una cobertura 100 por 100. El satélite es la única tecnología que llega a todas partes y la única que llega donde no llegan las demás”. Los países en desarrollo se han dado cuenta de ello y están apostando por el satélite. Una tecnología que hoy compite en velocidad y precio con el ADSL y que no deja de evolucionar. “En el futuro –añade el director general de Quantis- veremos que no tiene sentido seguir desplegando cable”.
Cada día son más las familias, empresas y municipios que han optado por el satélite. Usuarios finales y también empresas y negocios como hoteles rurales, explotaciones ganaderas, estaciones de servicio o parques eólicos que se construyen en mitad de la nada. Las zonas más desfavorecidas se encuentran en las comunidades autónomas de Galicia, Castilla y León y Canarias, “si bien- concluye Antuña- hay puntos blancos en toda la geografía española. Aún queda mucho por hacer, es importante que los habitantes de las zonas rurales accedan a los mismos servicios que los de zonas urbanas”.