Tecnologías sanas para el cuerpo y perjudiciales para el dispositivo, y viceversa
La tecnología lleva en estos tiempos a todo tipo de paradojas. Los virus y enfermedades no sólo afectan al cuerpo humano, sino también a los sistemas informáticos, y a veces lo que es sano para el organismo puede ser nocivo para el hardware, como parece ocurrir con los cigarrillos electrónicos. Y al revés, los móviles provocan cada vez más problemas en la espalda.
Es verdad que decir que los cigarrillos electrónicos son sanos para el organismo es del todo impreciso; en todo caso, podrían ser más sanos que el problema que pretenden resolver –o sustituír-, que es el tabaco tradicional. En cualquier caso, pueden acarrear un problema de infección informática, según ha sido descubierto recientemente, y publicado por el diario británico The Guardian.
La historia es sencilla y, para qué negarlo, poco sorprendente, pues no difiere mucho de la posibilidad de transmitir malware a través de pen-drives o reproductores MP3 ó MP4. Es decir, el posible problema estriba en el uso de un conector USB para recargar la batería del cigarrillo electrónico. Esa fue la causa descubierta para una infección de malware en el ordenador de un ejecutivo: El cigarrillo (de fabricación china), recargado con ese tipo de cable en el equipo, era la fuente del software malicioso.
Por si acaso la historia pudiera parecer poco verosímil a algunos, nada menos que Rik Ferguson, responsable de seguridad de Trend Micro y por tanto una autoridad en la materia (de la seguridad IT, no de la salud -que sepamos-), considera que este suceso le parece perfectamente factible.
Y como mencionábamos al principio, la perspectiva contraria también se da: Tecnología que provoca problemas de salud en las personas. En concreto nos referimos a los smartphones, que nos acostumbran a adoptar una postura del cuello que puede resultar perjudicial para la columna vertebral. Así lo advierte un estudio publicado por la revista médica Surgical Technology International (también son autoridades en lo suyo).
La inclinación de la cabeza que suelen efectuar los usuarios de móviles y tabletas (es decir, la inmensa mayoría de la población) es un factor de riesgo serio para la espalda, al suponer importantes problemas lumbares y de cervicales. No en vano, el estudio calcula que la tensión ejercida por la cabeza (de entre 4 y 5 kilos de peso) se multiplica hasta los 27 kilos si el cuello está doblado 60 grados. Por lo tanto, recomiendan elevar el dispositivo móvil con el brazo para evitar dicha postura.
No es precisamente nuestra intención servir de excusa para que algunos tecnófobos encuentren un nuevo argumento a su favor, puesto que no son pocos los beneficios que la tecnología está aportando al mundo de la salud, mejorando cada vez más sus capacidades. Médicos, cirujanos y enfermeros cuentan con herramientas TI progresivamente más eficaces.