¿Cuánto tiempo le queda al pago en efectivo, si es que llega a desaparecer?
Hace poco conocimos una iniciativa del Gobierno de cara a la progresiva desaparición de los pagos en metálico. Lo que parece un intento por forzar lo que ya estaba ocurriendo de manera natural con la aparición de los nuevos métodos digitales de pago, parece motivado por la nueva situación sanitaria en la que evitar los contactos, pero al mismo tiempo choca con la falta de costumbre en ciertos ámbitos. Quizá quede menos de lo que creemos para que las monedas queden relegadas a su uso para jugar a los chinos. O quizá sea al revés. Las nuevas tecnologías han supuesto un cambio en nuestros hábitos, desde la forma en la que nos comunicamos hasta el modo en que compramos, pasando por cómo realizamos nuestros pagos. Pero ¿es posible provocar de forma dirigida la eliminación del efectivo?
De acuerdo con Manuel Prieto, CEO de Easy Payment Gateway, agregador de servicios de pago y gestión de fraude español, no es algo que deba imponerse por parte de las empresas o los gobiernos. “En el caso concreto de España, es importante recordar que todavía hay muchas personas, sobre todo mayores, que siguen apostando por el efectivo. No creo que se trate de una erradicación por parte de compañías o gobiernos, sino que debe ser el propio consumidor el que termine expulsándolo”, señala el experto.
A pesar de ello, reconoce que, sin duda, existen otros métodos de pago que están ganando fuerza. Algunos, desde hace más tiempo; otros, de instauración más reciente. Por este motivo, el CEO de Easy Payment Gateway recuerda la importancia de que los negocios cuenten con métodos de pago adaptados a las necesidades de cada consumidor.
Las tarjetas de crédito y débito, por ejemplo, han ido desplazando al efectivo a lo largo de los años gracias a su comodidad. “Incluso, a causa de la crisis del COVID-19, ha sido el método de pago recomendado para evitar la manipulación de dinero en efectivo, que pasa constantemente de unas manos a otras”, recuerda el experto. Sin embargo, aunque esta opción siga contando con muchos adeptos, hay otras alternativas que son cada vez más utilizadas por los españoles.
Es el caso del pago a través del smartphone. Basta con que el usuario cuente en su móvil con la tecnología NFC y la aplicación correspondiente para poder realizar pagos a través de este método. “Puedes olvidarte de la cartera, dejar en casa el efectivo y las tarjetas… Y solo con tu móvil estarás cubierto ante cualquier imprevisto. Ahí es donde reside el éxito de este método”, explica el CEO de Easy Payment Gateway. El pago por teléfono o a través de SMS son otras de las opciones que nuestros smartphones nos brindan hoy en día para pagar de forma fácil y rápida.
Pero, si de comodidad y sencillez se trata, es probable que la biometría se sitúe como vencedor en el podio de los métodos de pago. De acuerdo con el experto, el pago con autenticación a través de la huella dactilar está ya muy extendido. Le seguirán el reconocimiento facial o el ocular que, según afirma, ganarán cuota de mercado en los próximos años. “Este tipo de soluciones no solo confirman que el pago está en manos adecuadas, sino que también nos permite llevar nuestra contraseña siempre encima”, puntualiza.
El 50% de los usuarios asegura que abandonaría una compra si la empresa no cuenta con su método de pago favorito. Por este motivo, el CEO de Easy Payment Gateway recuerda “la importancia de contar con un amplio abanico de soluciones de pago que evite la pérdida de ventas por esta cuestión y que, a su vez, mejore la experiencia de usuario y ayude a fidelizar clientes”.