Los científicos abogan por una inteligencia artificial beneficiosa
Uno de los artículos más vistos del finalizado 2014 en hayCanal fue el referente a un estudio publicado por el proveedor de tecnología FICO, referente a la inteligencia artificial y a cómo el Big Data y la analítica imitan a la mente humana. Planteábamos entonces el paralelismo con la ciencia ficción e incluso mencionábamos la posibilidad de un futuro peligroso.
Para 150 científicos, entre los cuales hay profesionales de Microsoft, Google, o IBM, esta visión comparable a la de ciertas películas futuristas podría no estar muy alejada de las posibilidades potenciales de la inteligencia artificial. Por ello, han firmado una carta abierta publicada el 11 de enero por The Future of Life Institute (FLI), en la que abogan por una prioridades de investigación de la computación que sean beneficiosas para la humanidad y eviten los posibles riesgos.
Tal y como explica la carta abierta, en las dos últimas décadas se ha invertido de manera muy notoria en la creación de sistemas inteligentes, que perciben y actúan en un entorno, basándose en la capacidad de toma de decisiones apoyada en la racionalidad estadística y económica. El establecimiento de marcos teóricos compartidos, junto con la disponibilidad de los datos y la capacidad de procesamiento, ha dado éxitos notables en diversas tareas tales como el reconocimiento de voz, la clasificación de imágenes, los vehículos autónomos, la traducción automática, o los sistemas de pregunta-respuesta.
“En la actualidad existe un amplio consenso en que la investigación en IA está progresando de manera constante, y en que su impacto en la sociedad es probable que aumente”, se explica en la carta. “Los beneficios potenciales son enormes, ya que todo lo que la civilización tiene que ofrecer es un producto de la inteligencia humana; no podemos predecir lo que podríamos lograr cuando esta inteligencia se ve magnificada por las herramientas de AI puede proporcionar, pero la erradicación de la enfermedad y la pobreza no son insondables”, a lo que se añade (y aquí se menciona el posible aspecto negativo): “Debido al gran potencial de la IA, es importante investigar cómo aprovechar sus beneficios y evitar peligros potenciales”.
En un adjunto a la carta se mencionan diversos ejemplos. Uno de ellos es el de los vehículos autónomos: “¿Cómo debería un vehículo autónomo elegir entre una pequeña probabilidad de daño a un ser humano contra la casi certeza de un cuantioso daño material? ¿Cómo deben los abogados, expertos en ética y legisladores involucrar al público sobre estos temas?”, explica la carta. Las armas autónomas o la privacidad digital (que actualmente ya está suponiendo un quebradero de cabeza) son otros campos mencionados.
