Ahorrar energía al desescalar
La crisis del Covid-19 ha provocado grandes pérdidas a niveles económicos para muchas empresas, sobre todo las pequeñas. Poco a poco muchas van encarando la desescalada y el regreso a la actividad, pero aún a medio gas.
Desde Lucera, la compañía eléctrica que apuesta por la eficiencia energética con energía 100% renovable, aportan cinco consejos para reducir el gasto energético y ayudar a las PYMES a cuidar el bolsillo en la reapertura.
¿Qué oficina o pequeña empresa no desea reducir el gasto en energía que asume cada vez que ‘levanta la persiana’? Ahora más que nunca el día a día de cualquier negocio tendrá como objetivo disminuir los costes fijos. Por ese motivo, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones para asegurarse que el nuevo espacio de trabajo sea lo más eficiente y sostenible posible, tanto desde el punto de vista económico como el medioambiental.
1. Planifica con los datos en la mano: revisa las facturas de al menos los últimos 6 meses y establece cuáles son los patrones de consumo en función de cuántas personas trabajan en la oficina, si el horario es intensivo o fraccionado, cuántas horas permanece operativa o cuáles son los dispositivos que mayor consumo originan. A partir de ahí, interésate por qué tarifa tienes contratada.
2. Busca la eficiencia: ahorrar energía es mucho más fácil cuando se realiza un consumo eficiente. Si dispones de cocina o un espacio similar en la oficina; comprueba que todos los electrodomésticos, como cafeteras, frigoríficos o microondas, y a otros dispositivos, funcionan y plantéate su sustitución por otros más eficientes si merece la pena. También con la temperatura. Tanto en invierno como en verano solemos desperdiciar energía y dinero. Como orientación, la temperatura debería oscilar entre los 24 y los 26 ºC en verano y entre los 21 y 23 ºC en invierno.
3. Cámbiate a las luces LED: si aún queda alguna bombilla incandescente, halógena o fluorescente en tu oficina, ha llegado el momento de dirigirte con ellas a un punto limpio y apostarlo todo al LED. Con esta tecnología no solo puedes ahorrar hasta un 80% en tu consumo, sino que utilizarás un dispositivo con una prolongada vida útil, que se estima en 20 años de uso diario o 175.000 horas. Además, aportan luz inmediata (sin parpadeos), no emiten y son más respetuosas con el medio ambiente.
4. El ‘modo ahorro’ en equipos informáticos puede ser tu mejor aliado: es común que, con las jornadas partidas, los equipos informáticos se dejen en ‘modo reposo’, cuando pasado un tiempo merece la pena apagarlos y volverlos a encender. Sin embargo, el ‘modo reposo’ sí puede resultar muy útil; puedes configurar estos mismos equipos, junto con otros periféricos (impresoras, monitores auxiliares, escáneres, etc.) para que pasen al modo de ahorro de consumo tras unos minutos de inactividad.
5. Los detectores de movimiento no son solo cosa del cine: ¿Por qué consumir energía cuando no es necesario? Con los sensores de movimiento puedes hacer que la luz se active de forma automática solo cuando es necesario. Esto es idóneo en zonas de paso, como pasillos, y también para aseos. También puede ser muy útil para ahorrar en otros espacios de tu oficina. Incluso puedes adquirir luces programables con las que ajustar el tiempo y la intensidad de la luz que necesitarás en distintos momentos del día.
“Nos encontramos en un momento en el que debemos implementar modificaciones con el inicio de las medidas de desescalada. Por eso es una buena oportunidad para revisar la factura de la luz con el objetivo de ahorrar en costes fijos. Hay muchas maneras de alcanzar la eficiencia energética en las empresas, la clave está en enfocarse en los consejos que solemos brindar a nuestros diferentes clientes”, señala Emilio Bravo, fundador y CEO de Lucera.