Elegir la tarjeta de memoria de una cámara de seguridad
El uso de cámaras de seguridad ha crecido enormemente en todos los ámbitos; ya sea para proteger nuestro hogar, nuestro negocio o las calles de nuestra ciudad. Tanto personas como empresas y organismos públicos hacen uso de estos aparatos para asegurar su entorno.
Elegir el dispositivo adecuado a las necesidades es crucial antes de realizar cualquier inversión, pero ¿tienen realmente la tarjeta adecuada? Por esta razón, Kingston Digital Europe, una división de Kingston Technology Company, líder mundial independiente de productos de memoria y soluciones tecnológicas, señala algunos consejos para poder escoger la mejor opción, ya que depende del uso que se le vaya a dar a la tarjeta. Por ejemplo, dependiendo del tiempo que esté encendida la cámara, de las condiciones climáticas en donde se encuentre, y de la manera que grabe.
• Almacenamiento: depende en gran medida de cómo grabe nuestra cámara, si lo hace de forma continua o solo cuando detecta movimiento. También hay que tener en cuenta la resolución a la que va a grabar, ya que, a más resolución, más memoria vamos a necesitar. Lo apropiado es moverse en el rango de 32 a 512 GB, siendo este último el óptimo si nuestra idea es grabar a 4k o superior y de forma continua.
• Velocidad: la mayoría de las cámaras están pensadas para albergar en su interior tarjetas de tamaño microSD. Además, para nosotros solo es importante en este caso la velocidad de escritura de nuestra tarjeta, es decir, a la velocidad que graba (escribe) datos en su memoria. Para que nuestra cámara no tenga ningún problema a la hora de grabar, en HD o 4k y superiores, lo ideal es que optemos por una tarjeta que tenga una velocidad de escritura por encima de los 70 Mb/s y que soporte velocidades UHS-I (V30) al menos.
• Durabilidad: en este apartado, debemos tener en cuenta el desgaste de nuestra cámara, del que dependen varios factores: tiempo de grabación, intensidad, las condiciones climáticas y la ubicación (interior o exterior, calor, temperaturas gélidas, vientos fuertes, etc.). En función de estas variables, tendremos que optar por una tarjeta más resistente si vamos a tenerla al aire libre.
“Las cámaras de seguridad son parte de la vida diaria de muchos ciudadanos, empresas e instituciones públicas, ya sea para proteger su hogar o su negocio. Es por ello por lo que hay que hacer una buena elección de tarjeta para poder aprovechar todas las funcionalidades y capacidades del dispositivo, ya que hay necesidades y funciones muy diferentes para cada situación”, señala Pedro González, desarrollador de negocio de Kingston en España.