Construcción poco digital
Prácticamente la mitad de los líderes del sector de la construcción creen que el sector carece de la capacidad digital para hacer frente a los requisitos de una ciudad inteligente.
Finalcad, líder en soluciones de software para el sector de la construcción, ha publicado los resultados del estudio que ha llevado a cabo con la colaboración de 400 líderes de la construcción en Francia, España, Singapur y Japón. El estudio analiza el futuro de la digitalización en el sector.
Casi la mitad (47 %) de los encuestados cree que el sector de la construcción no cuenta con la capacidad digital necesaria para hacer frente a las demandas de una ciudad inteligente (‘smart city’), lo cual resulta pertinente puesto que el desarrollo inteligente o ‘smart’ continúa cobrando fuerza en todo el mundo. Por ejemplo, pensando ya en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París de 2024, el gobierno francés ha indicado que las nuevas instalaciones y los nuevos edificios que se emplearán deberán ser sostenibles y ‘smart’. Para cubrir esta demanda, las empresas de construcción tienen que reducir la brecha digital y, dado el impacto que la COVID-19 aún tiene en el sector, deben acelerar ahora la transformación digital o se arriesgan a perder oportunidades clave para generar ingresos en el futuro.
Todo apunta a que existe una cierta disposición en el sector para hacer frente al reto, dado que un 95 % de los encuestados afirmó que su empresa estaba ‘preparada hasta cierto punto’ para la recopilación de big data y la adopción de las tecnologías digitales. No obstante, aún hay que superar obstáculos. Un 68 % mencionó que el no poder recopilar datos en tiempo real era uno de los principales retos en relación con el desarrollo inteligente. Más de un cuarto (28 %) de los encuestados señaló que uno de los retos es la incapacidad para crear una huella digital de un edificio o activo. Superar estos escollos será crucial para el desarrollo inteligente y también para la construcción respetuosa con el medioambiente. La Comisión Europea, por ejemplo, presentará a finales de 2020 un nuevo marco, Level(s), para adoptar un nuevo enfoque en lo que respecta a la construcción de inmuebles sostenibles. Level(s) anima a constructores, arquitectos y a las autoridades a pensar en el ciclo de vida útil de un edificio, desde la compra de materiales hasta la eventual demolición y reciclado de dichos materiales. Sin embargo, el estudio destaca que las empresas de construcción no están preparadas para este tipo de planteamientos en la actualidad. Muchas no pueden registrar y compartir datos sobre la procedencia de los materiales (32 %) o sobre el porcentaje de residuos de una obra que se reciclan (42 %).
“La COVID-19 ha afectado gravemente al sector de la construcción y los ingresos de las empresas se han llevado la peor parte”, indica Franck Le Tendre, CEO de Finalcad. “Sabemos por nuestro estudio que los márgenes de beneficios estaban ya de media en el 2 % antes de la COVID-19. Aunque no cabe duda de que este es un reto considerable para el sector, también representa una oportunidad para que las empresas de construcción den el paso hacia la digitalización y se preparen para el futuro. Al darle prioridad ahora a la digitalización serán capaces de sacar provecho de tendencias futuras como las ciudades inteligentes y la construcción ecológica. Esto les permitirá desempeñar su papel a la hora de crear un futuro más sostenible además de tener acceso a nuevas fuentes de ingresos que resultarán fundamentales para la recuperación a largo plazo”.
El estudio también reveló que la brecha de destrezas digitales es un obstáculo para la transformación digital para la mayoría de las empresas de construcción. Un 96 % de los encuestados siente que su personal carece hasta cierto punto de las destrezas necesarias para utilizar herramientas digitales y aplicaciones. Para superar este reto, las empresas de construcción deben invertir en soluciones intuitivas que se centren sobre todo en la experiencia del usuario y la facilidad de uso. Esto garantizará que todos los trabajadores, independientemente de su nivel de destrezas existente, puedan usar las nuevas herramientas. Al promover la adopción de este tipo de herramientas digitales, la digitalización se acelera y la productividad, eficiencia y colaboración mejoran en todos los proyectos. Impulsar este cambio es especialmente importante si tenemos en cuenta que el 97 % de los líderes del sector de la construcción admite que es un reto trabajar de forma colaborativa y compartir información de forma sencilla.
“Reducir la brecha de destrezas digitales será clave a la hora de apoyar una colaboración y una comunicación eficaces en la construcción”, añade Franck Le Tendre. “Esto también será esencial para recuperarse de la disrupción provocada por la COVID-19, que ha cambiado por entero el modo en el que las empresas pueden operar tanto dentro como fuera de la obra. Crear un espacio digital de trabajo permitirá a las empresas del sector sentar las bases de un éxito futuro. Además, un entorno de trabajo digital resulta mucho más atractivo para una generación de trabajadores más jóvenes y no olvidemos que para 2025, se calcula que el 75 % de los profesionales serán milenials. Este enfoque permitirá a las empresas desempeñar un papel en las tendencias futuras y en las oportunidades de ingresos en la era pos-COVID-19”.