Estados Unidos y la tasa Google, un conflicto con visos de eternizarse
Junto al serial sobre la guerra entre Trump y Twitter, se ha desarrollado ya un nuevo culebrón con el presidente de los Estados Unidos entre los protagonistas, y no hay que buscarlo ni en HBO ni en Netflix, sino que, como aquél, está ocurriendo en la vida real. Se trata de la tramitación en varios países como España del impuesto digital o tasa Google.
Ya comentábamos en su día, en una actualización de esa última noticia enlazada, que Estados Unidos había abierto una investigación a España y a otros ocho países más, en relación al proceso de aprobación y puesta en marcha de los impuestos sobre servicios digitales de grandes empresas tecnológicas estadounidenses, como Facebook, Amazon o la propia Google, para que tributen en los países en los que generan beneficios. En aquel mismo apunte ya se aludía a la posibilidad de que Estados Unidos aplicara aranceles comerciales como medida compensatoria (que se puede percibir más bien como represalia).
No es de extrañar que, en cualquier asunto con EEUU como actor del elenco en este tipo de “series”, los “capítulos” se multipliquen y se multipliquen más de lo esperado, más aún con un presidente como Donald Trump subiendo los niveles de audiencia. Por ello, en Hay Canal nos abstenemos de realizar un nuevo artículo por cada comentario nuevo que surge como si fuera en si mismo una noticia. Pero de vez en cuando toca repasar el estado de las cosas.
Y lo último que ha ocurrido, esta semana, es que la administración Trump ya se ha puesto en contacto, mediante cartas, con los países (incluyendo España) que están llevando a cabo la tramitación de la tasa digital, y dichos países han respondido. Pero la cuestión es que todo sigue igual: EEUU mantiene su posición amenazante, contraria al impuesto, y los países europeos afirman que seguirán adelante con el mismo. Igual, pero más tenso, eso sí. Lo dicho, noticia como tal no hay.
Bueno, en realidad sí que ha habido un cambio, y es que Estados Unidos también ha decidido suspender sus negociaciones con Europa para la creación del impuesto a nivel global. Dichas conversaciones habían sido impulsadas por la OCDE para gravar a las empresas tecnológicas de manera más equitativa. Además, varios países europeos esperaban que esta tasa digital les ayudara a la recuperación económica tras la crisis derivada de la pandemia del Covid-19.
Estados Unidos explica en la carta enviada a los ministros europeos de Finanzas de Francia, Italia, España y Gran Bretaña, que se encuentran en un "impase" y no han podido llegar a un acuerdo, "ni siquiera provisional", sobre cómo podrían implementarse estas tasas a las compañías digitales. Steven Mnuchin, secretario del Tesoro de los Estados Unidos, dice en ella que "este es un momento en que los gobiernos de todo el mundo deberían centrar su atención en tratar los problemas económicos resultantes de Covid-19". O Mnuchin no ha reparado en que eso mismo es lo que, como hemos dicho, intentan algunos mediante la tasa Google, o más bien no considera esa como la solución idónea (al menos para EEUU y sus empresas, claro).
A este respecto, Bruno Le Maire, ministro de finanzas francés, ha respondido que: "Estábamos a pocos centímetros de un acuerdo sobre el impuesto para los gigantes digitales, quienes son quizás los únicos en el mundo que se han beneficiado inmensamente del coronavirus". El ministro galo considera una provocación la misiva estadounidense.
Por su parte, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, ha explicado que la Comisión Europea seguirá adelante con una nueva propuesta pese a que los EE.UU hayan decidido retirarse de las negociaciones.
España planea, como explicó a principios de junio su ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que la tasa tenga un "carácter transitorio hasta que se apruebe una normativa a nivel mundial o al menos europeo". Todavía hay plazo hasta finales de año para retomar las conversaciones a nivel global. Si no se alcanza un acuerdo, países como España podrían seguir adelante con esta tasa y afrontar posibles aranceles.
Habrá más capítulos. Seguiremos informando, pero sólo de los realmente relevantes, de los que de verdad sean noticia. No hay tiempo, en esta época de cambios constantes, para los episodios de relleno.
