La automatización de TI en 2025
En 2025, la IA y la tensión geopolítica obligarán a las empresas a explorar nuevas tecnologías e innovar más rápido que nunca.
El reto está en hacerlo sin descuidar los costes, la seguridad y la sostenibilidad. La eficiencia se convierte en una prioridad. Estas son las tendencias clave de automatización de TI que podemos esperar.
Estrategia empresarial
Para mantenerse por delante de la competencia, las empresas tienen que evolucionar su infraestructura para incluir un enfoque de automatización empresarial. Esto significa pasar de silos de automatización con diferentes herramientas, a un nuevo enfoque uniforme que aproveche las inversiones previas, pero que responda rápidamente de extremo a extremo a los eventos y pueda escalar.
Esta es una gran oportunidad para derribar las barreras que impiden la colaboración, de modo que las personas de diferentes equipos en toda la empresa puedan trabajar con diversas herramientas, proveedores y nubes de forma consistente. Una estrategia para toda la empresa permite a la organización compartir las mejores prácticas y los aprendizajes, e implementar directrices y modelos estándar, lo que ayuda a evitar la duplicación de esfuerzos.
Day zero automation
Además, con la disrupción en el ámbito de la virtualización, las empresas están buscando cómo aprovechar la contenerización y avanzar en sus capacidades nativas de la nube. En combinación con las presiones de precios de la nube, en lugar de volver al statu quo, las organizaciones están considerando la modernización más amplia como una oportunidad para adoptar la automatización desde el día cero, en lugar de adaptarla posteriormente para reemplazar las prácticas o procesos existentes.
Arquitectura para la nube híbrida
En 2025, dos importantes leyes captarán la atención en la región EMEA: DORA (Ley de Resiliencia Operativa Digital) y la Ley de Ciberresiliencia. Con la seguridad y la resiliencia empresarial como máxima prioridad dada la inestabilidad global, los equipos de infraestructura tendrán un papel clave en la definición de cómo las empresas podrán responder a cualquier evento externo.
El reglamento DORA tiene como objetivo reducir los riesgos sistémicos en los casos en que las instituciones financieras puedan depender de un único proveedor de infraestructura de nube de gran tamaño. Las empresas dependerán de una mayor automatización de la infraestructura y el despliegue de aplicaciones para responder rápidamente a los cambios, lo que conducirá a arquitecturas de nube híbrida, así como a una mentalidad de "automatización primero" dentro de todos los equipos técnicos.
La Ley de Ciberresiliencia exigirá a las empresas que comprendan cómo pueden seguir manteniendo la seguridad de toda la tecnología que venden y despliegan. Esto destacará la importancia de las actualizaciones de software para estos dispositivos, incluso cuando estén desconectados durante un período o desplegados lejos del centro de datos. Los dispositivos en el "edge", como estos, utilizarán cada vez más despliegues automatizados para cumplir con estos nuevos requisitos y mantener la seguridad de un mundo cada vez más conectado.
El retorno de las cargas de trabajo al centro de datos (también conocido como "salida de la nube") cobrará impulso en 2025. Esto se debe a que las empresas que no se modernizaron adecuadamente para la nube se sienten desilusionadas por la falta de ahorros y, en el actual clima geopolítico, buscan minimizar los riesgos. Este regreso al centro de datos les ofrece la oportunidad de crear una infraestructura mucho más eficiente, similar a la nube, aprovechando enfoques, herramientas y prácticas de automatización modernas.
Automatización impulsada por eventos
La presión sobre los equipos de infraestructura para responder con mayor rapidez a incidentes o solicitudes, sin incrementar los costes, impulsa a muchas organizaciones a ampliar el alcance de sus respuestas automatizadas. Conectar las inversiones existentes en automatización para que respondan automáticamente a tickets de servicio o eventos de monitorización permite mejorar la respuesta humana o, en algunos casos, lograr una respuesta "sin intervención" totalmente automatizada. Esto reduce el tiempo de recuperación ante incidentes y permite una gestión mucho más completa de un mayor volumen de los mismos.
Automatización potenciada por IA
La escasez de talento en los equipos de TI está impulsando el uso de la generación de código mediante IA. Si bien la frase "no perderás tu trabajo por la IA, sino por alguien que la use" ya es un cliché, la realidad es que ahora se puede generar código a partir de instrucciones en lenguaje natural. A medida que los modelos mejoren y las opciones de despliegue se vuelvan más flexibles en 2025, aumentará el uso de la IA para la codificación y la creación de scripts de automatización. Los modelos combinarán conjuntos de datos más extensos con el conocimiento de los entornos de los clientes, de modo que la generación automática de código será más precisa y adaptada a las necesidades individuales, ahorrando tiempo y esfuerzo a los desarrolladores y apoyando a los empleados menos experimentados. Quienes dominen esta capacidad impulsarán la productividad de los equipos y facilitarán la incorporación de nuevos miembros a medida que adquieren nuevas habilidades.
Gobernanza
Las empresas que están teniendo éxito con sus estrategias de modernización y que comprenden qué cargas de trabajo son adecuadas para la nube continuarán migrando cargas de trabajo más diversas a este entorno. Si bien esto aumenta la flexibilidad de su infraestructura, también puede dificultar la predicción de costes. Además, existe la presión de ser más sostenibles y reducir la huella de carbono del consumo informático.
En este contexto, la capacidad de definir el despliegue de la infraestructura y reconfirmar constantemente su uso, con la opción de prevenir el consumo excesivo o reducirlo según políticas predefinidas, proporcionará una ventaja competitiva con respecto a aquellos que lo gestionan manualmente. A lo largo de 2025, prevemos una mayor integración de directrices en las plataformas de automatización empresarial, lo que ayudará a reducir costes y a cumplir los objetivos de responsabilidad social corporativa (RSC).
Si bien la IA seguirá estando en la parte superior de la lista de innovación de todos, los costes y las complejidades de la gestión de entornos y cargas de trabajo se convertirán en una prioridad mayor. Comprender cuándo se pueden cerrar los entornos automáticamente para ahorrar dinero y realizar un seguimiento más preciso de las inversiones se incluirá en la agenda del CTO. Las mentalidades de "automatización primero" y las herramientas que se integran con las plataformas de observabilidad y monitoreo de los clientes se volverán más frecuentes a medida que aumentan la flexibilidad y ahorran dinero.
Nube soberana
Las tendencias descritas anteriormente, incluidos los cambios regulatorios y el deseo de los clientes europeos de mantener los datos para los modelos de IA dentro de la región europea, conducirán a un mayor fortalecimiento de las nubes soberanas con sede en Europa y de los esfuerzos de los hiperescaladores para implementar capacidades similares dentro de los centros de datos europeos. Estas capacidades, como con toda la entrega en la nube, se basarán en un enfoque fuertemente automatizado.
Matt Roberts, Ansible Platform Lead, EMEA, Red Hat
