El nuevo Director Financiero de 2020
En los últimos años, el trabajo del Director Financiero ha cambiado profundamente en las empresas, debido a la irrupción de las nuevas tecnologías.
Al igual que otros servicios, las misiones de los CFOs tienden a abarcar plenamente la digitalización de los sistemas de información y, en particular, la automatización. Indispensable para el valor de la empresa, la influencia del CFO debe facilitar la búsqueda del crecimiento así como en la gestión de las complejidades del control de costes.
Según Enrique Escobar, Managing Director Iberia & Latam de Talentia Software, “a medida que el ritmo de la automatización de tareas se acelera en las empresas, los departamentos de finanzas se adaptan constantemente. Su mayor desafío será colocar a las personas en el centro de los avances tecnológicos que se suceden (Blockchain, IA, robots, desmaterialización). Éstas representan oportunidades reales para la función financiera, pero todavía es necesario saber cómo dominarlas”.
Según una encuesta de PwC, los directores financieros estiman que sus equipos siguen dedicando el 80% de su tiempo a la producción de datos, y tan solo un 20% al análisis. Es probable que estas cifras se inviertan en los próximos años. Para facilitar esta transición y según los expertos de Talentia Software, el Director Financiero del 2020 debe convertirse en el eje de la innovación en su organización:
Dominar los datos y la seguridad de estos
Hoy en día los datos están en constante crecimiento y han situado al director financiero en el epicentro de la empresa. Por lo tanto, su papel ha cambiado de transaccional a central. Según un estudio de Accenture Strategy, el 90% del tiempo de los directores financieros debería dedicarse ahora a los datos, pero pocas empresas han llegado a esta fase todavía. La tarea es muy compleja ya que requiere un cambio en los perfiles y habilidades de los miembros del equipo.
Así mismo, la seguridad de los datos se ha convertido en un tema importante para el departamento de finanzas, en particular con la implementación de la nueva normativa de protección de datos (GDPR) en mayo de 2018. La normativa europea ha dado lugar a una creciente complejidad que debe ser dominada por los equipos de finanzas. La digitalización está provocando un aumento del riesgo de seguridad, obligando a las organizaciones a implantar procesos de contención y control del riesgo a través de un control más exhaustivo de los datos, la evaluación comparativa de lo que hacen los competidores y el fortalecimiento del modelo de negocio.
Se acabó el tomar decisiones a ciegas
CRM, páginas web, redes sociales, campañas de marketing… Millones de datos son generados por las empresas y procesarlos todos es imposible: estamos hablando de nada más y nada menos que de Big Data. Sólo la IA permite a las empresas analizar todos estos datos para extraer información de alto valor añadido en la toma de decisiones. En un momento en que la experiencia del cliente y del empleado es decisiva, estas decisiones pueden ser críticas.
Vincular la ciencia de los datos y los negocios
Como hemos dicho, los datos y el análisis se convierten en elementos indispensables para el Director Financiero. Ya sea para desarrollar las ventas, analizar el comportamiento de los clientes y así controlar los costes, o más tradicionalmente para explorar nuevos mercados. La inteligencia artificial y la robotización de procesos se convierten en básicos para gestionar todos estos datos. Según PwC, se espera que alrededor del 50% de las compañías utilicen estas tecnologías para mejorar su rendimiento en 2020.
Adquisición de talentos y crecimiento del negocio
En el año 2020, el Director Financiero necesita gestionar la adquisición y retención de talento para construir un plan estructurado de gestión del talento. La prioridad se la llevan las habilidades interpersonales. Las habilidades de datos se están volviendo esenciales para complementar a los cada vez más numerosos equipos de finanzas con múltiples tareas y habilidades.
Los directores financieros se están centrando ahora en cuestiones de inversión para el crecimiento del negocio, y cada vez más directores financieros ven esto como una oportunidad para iniciar una profunda transformación organizativa para la creación de valor. Por último, están asumiendo un papel central en la evaluación de las inversiones en tecnología que deben realizarse para descubrir nuevas oportunidades de negocio.