Cómo puede la IA mejorar la eficiencia de las empresas

Hace tan solo unos años, pensar en un entorno laboral dominado por la inteligencia artificial y los sistemas de automatización inteligentes podía parecer una utopía. Nada más lejos de la realidad. En la actualidad, cada vez son más las organizaciones que están implementando este tipo de tecnologías en sus procesos productivos.

De acuerdo a un estudio realizado por IDC, la inversión de las empresas en inteligencia artificial se duplicará en los próximos tres años. Además, para 2020, el 64% de las organizaciones ya habrán adoptado esta tecnología. Pero, ¿cómo puede realmente la inteligencia artificial mejorar la eficiencia y aportar nuevos beneficios a las empresas?

OpenText, líder global en Gestión de la Información Empresarial (EIM), ha querido explicar cuatro ventajas de la inteligencia artificial que toda compañía debe tener en cuenta si quiere generar beneficios tangibles de forma rápida.

• Acelera las búsquedas. La inteligencia artificial tiene el enorme potencial de buscar y localizar grandes cantidades de datos de forma rápida. En plena era del Big Data, las organizaciones se enfrentan a algunos retos a la hora de gestionar la información. En este sentido, hay demasiados datos estructurados y no estructurados dentro de la compañía. Por ello, la inteligencia artificial es la única forma factible de organizar, categorizar y analizar todas esas grandes cantidades de información.

• Automatiza los procesos. Cuando un proceso de negocio es repetitivo, se basa en reglas simples y tiene un número limitado de resultados, la inteligencia artificial es capaz de automatizarlo, eliminando la necesidad de intervención manual. De esta forma, la única aportación humana sería la supervisión y el mantenimiento, lo que liberaría al personal para realizar actividades de mayor valor.

• Mejora la toma de decisiones. El verdadero potencial de la inteligencia artificial reside en su capacidad para trabajar de forma rápida con grandes cantidades de datos de diferentes fuentes con el fin de ofrecer soporte en las decisiones en tiempo real. La inteligencia artificial no reemplaza al trabajador, simplemente potencia su capacidad para llevar a cabo su cometido. Por ejemplo, muchos hospitales están comenzando a utilizar esta tecnología para ayudar a los médicos a crear planes de tratamiento individuales basados en la información personal del paciente.

• Automatiza el servicio al cliente. Algunas organizaciones ya han comenzado a adoptar chatbots para mejorar su servicio al cliente. Gracias al procesamiento de lenguaje natural y al machine learning, los chatbots permitirán mejorar la experiencia de usuario y ofrecer un servicio más rápido y efectivo.

“Las nuevas tecnologías cognitivas permiten a las organizaciones aumentar la velocidad en sus procesos de producción, mejorar la calidad y reducir los costes. Además, la inteligencia artificial impulsa la toma de decisiones y optimiza la experiencia de usuario lo que se traduce en un mejor servicio al cliente”, señala Jorge Martínez, Director Regional de OpenText para España y Portugal.

No cabe duda de que la inteligencia artificial tiene un enorme potencial para ofrecer soluciones innovadoras y rentables a las organizaciones. Si tenemos en cuenta que vivimos en una época en la que los presupuestos son cada vez más limitados, los recursos más reducidos y las expectativas de los usuarios mayores, la inteligencia artificial puede ser el factor diferencial entre las empresas.