La Generación Z apuesta por una red de transportes más inteligentes en Europa
Xerox ha presentado un estudio que destaca cuáles son las preferencias de la Generación Z, entre 18 y 24 años, en Europa, en lo que a coches autónomos y servicios digitales inteligentes se refiere.
Según este informe, llevado a cabo entre 1.200 participantes en 12 ciudades de Reino Unido, Francia, Alemania, Bélgica y Países Bajos, para 2025 un tercio (32%) de la población entre los 18 y 24 años espera poder usar automóviles que se conduzcan por sí solos, un 41% afirma que no usará dinero en efectivo para pagar el transporte, y poco más de la mitad (el 51%) tendrá en cuenta la disponibilidad de servicios de transporte a la hora de decidir dónde vivir y trabajar.
Las conclusiones del estudio también ponen de manifiesto que este grupo de ciudadanos, conocido como “futuros viajeros frecuentes”, ya está llevando acabo lo que están aconsejando a la hora de desplazarse por su ciudad.
El 63% de los encuestados afirma que utiliza su smartphone o tablet como dispositivo principal para planificar trayectos y recibir información de su viaje; aproximadamente cuatro de cada diez ya emplean métodos de pago sin efectivo, como aplicaciones móviles o la opción de pago sin contacto o contactless; y alrededor de un tercio usa esas aplicaciones para obtener información sobre horarios (37%), tráfico (29%) y para reservar trayectos (30%).
“Estos futuros viajeros frecuentes que empiezan a viajar por nuestras ciudades tienen muchas expectativas sobre la red de transportes de Europa”, comenta Richard Harris, director de Comunicación y Marketing de la división de Sector Público Internacional de Xerox. “Por eso es importante mejorar la disponibilidad e infraestructura del transporte, incorporando servicios digitales como aplicaciones y soluciones de pago sin efectivo, si este sector quiere cumplir con las previsiones que revela nuestro estudio”.
¿Cómo les va a las ciudades europeas?
Si comparamos las ciudades que han participado en este informe, nos damos cuenta de que París es la “más inteligente” dado que casi la mitad de los entrevistados (47%) usa los smartphones y tablets como su dispositivo principal para planificar los desplazamientos, frente al 33% de la media europea. En Londres y Frankfurt (un 44% y un 38%, respectivamente) se da un comportamiento similar, aunque Berlín (un 21%) se queda atrás.
El estudio también destaca las diferencias que existen entre estos países cuando se les pregunta acerca del alcance de un transporte más inteligente para 2025. Casi la mitad (un 49%) de los entrevistados en Bélgica y Países Bajos espera contar con un transporte en el que se pueda pagar sin efectivo para 2025; de media, el 35% de los franceses espera utilizar coches eléctricos o autónomos en 10 años; y el 35% de los encuestados en Reino Unido, Alemania y Bélgica tendrán en cuenta el transporte público a la hora de elegir dónde vivir y trabajar.
“El sistema de transporte en Europa es muy variado, por lo que es normal que exista cierta complejidad”, continúa Harris. “Por eso los operadores de transporte, los urbanistas y los proveedores de infraestructuras son los que tienen que resolver esta complejidad y hacer del transporte público una experiencia sencilla, fiable e inteligente para quienes lo utilizan”.
“Integrar servicios mediante soluciones de ‘Movilidad como Servicio’ (MaaS por sus siglas en inglés de Mobility as a Service) inteligentes sitúa a los usuarios en el núcleo de la red de transportes, ya que permite diseñar servicios de transporte a medida en función de sus preferencias. Estos servicios también proporcionan los medios para lograr ese panorama de transportes más inteligente y simplificado que esperan los futuros usuarios”, concluye Harris.