Almacenes y automatización robótica

Cómo afrontar la carencia de suelo y los costes de integración gracias a la automatización y la robótica

Por Iván Peral Robles, Deployment Project Manager en Locus Robotics

El otro día, repasando las principales publicaciones sobre el sector logístico encontré un artículo que hablaba sobre dos de los principales dilemas de los almacenes de nuestro país. Los procesos de digitalización ya no acaparan tanto los titulares, ahora las noticias las protagonizan dos elementos que afectan a todos los sectores del mercado: la carencia de suelo, y, a su vez, el sobrecoste que puede implicar la integración de tecnología puntera.

Respecto al suelo, al pensar en nuestros clientes en Estados Unidos observo una gran diferencia entre los proyectos desplegados allí y los proyectos en Europa. Al otro lado del charco este problema no resulta tan grave, pero en España los pasillos se suelen comprimir muchas veces al mínimo, algo que puede dificultar la movilidad y la operatividad logística.

Debido al encarecimiento del metro cuadrado, se está optando precisamente por construir entreplantas en los almacenes. Gracias a soluciones robóticas como Locus Robotics, esto ya no resulta un problema, dado que el espacio que necesitan los robots para navegar es mínimo. En nuestro caso, el modelo Origin, por ejemplo, requiere solo 1 metro de ancho en los pasillos para transitar sin problemas. A su vez, no todas las soluciones de automatización robótica pueden utilizarse en entreplantas debido al peso de los propios robots; sin embargo las soluciones de Locus son una de las pocas que sí puede hacerlo.

Cuando hablamos con nuestros clientes nos encontramos con diferentes necesidades dependiendo de la estructura del almacén, por lo que, durante mi trayectoria, he podido configurar estrategias denominadas pick and pass, en las que la preparación de una orden se realiza en paralelo en distintos niveles del almacén. En este contexto, los robots móviles autónomos funcionan coordinándose, orquestando las operaciones para que todo el proceso sea exacto y funcione como un reloj. Esta tecnología facilita el trabajo en un espacio reducido, de modo que la flota  pueda dividirse entre plantas, según las necesidades operativas de cada momento.

Para optimizar y mejorar la productividad, nuestros ingenieros modelan la operación actual del almacén durante una fase comercial. Desde Locus Robotics diseñamos una tecnología capaz de realizar un despliegue ágil con una instalación y una configuración sencillas para que los almacenes no tengan que interrumpir sus operaciones habituales. Nuestra tecnología AMR mapea las instalaciones de forma dinámica para un despliegue rápido, un funcionamiento eficiente y una automatización optimizada acorde a las expectativas de nuestros clientes.

A su vez, se analiza cuáles son los procesos operativos, cómo se realizan todos los procedimientos y, en función del volumen de trabajo y dependiendo de la disposición de las estanterías u otras infraestructuras existentes, se diseña la solución adecuada para maximizar la productividad y minimizar los costes de operación en cada almacén.  Por ejemplo, si al hacer números durante la fase de modelado inicial, se determina que un almacén logrará un 70% de mejora de su productividad, el diseño de la solución será adecuado de forma que se alcance dicho objetivo.

Las solución AMR permiten cambiar a una estrategia de trabajo por zonas, donde los trabajadores permanecen en determinadas regiones dentro del almacén y el sistema concentra los pedidos similares en estas áreas, consiguiendo que la densidad de preparación de pedidos aumente drásticamente. Esto permite reducir hasta en un 80% las distancias a pie que los trabajadores realizan a lo largo de un día. En comparación con los antiguos flujos de trabajo basados en la utilización de carros, el tiempo de desplazamiento improductivo del operario se reduce, lo que conlleva al aumento del tiempo dedicado a la preparación de pedidos, aumentando la mejora de la productividad, llegando a multiplicarse hasta por 2 o por 3. Ahí entra en juego disponer de un equipo de optimización que sea capaz de aprovechar ese margen de mejora gracias a un proceso de mejora continua con seguimientos  semanales y a través de la evaluación de datos reales.

Otro de los factores clave que se plantean los inversores a la hora de implantar un sistema de automatización son los costes de integración. La clave del éxito reside en ofrecer una API muy sencilla y flexible que sea potente y necesite muy poco esfuerzo por parte de los equipos de IT. Muchas empresas utilizan soluciones WMS (Warehouse Management System por sus siglas en inglés) de los principales proveedores del mercado, que facilitan aún más la integración, ya que permite aprovechar los desarrollos previos ya realizados.

Otro de los requisitos técnicos para que los robots se puedan mover dentro de un almacén, es contar con una completa cobertura WiFi. Esto puede conseguirse reaprovechando la red existente dentro del almacén, o mediante el diseño e instalación de una nueva de red de conectividad, por parte de las empresas que implantan la solución, tales como Locus Robotics, para garantizar que los robots tengan cobertura y puedan desplazarse por todo el almacén. En un modelo de Robots as a Service (RaaS por sus siglas en inglés) como el de Locus Robotics, ese sería el único CAPEX, el único coste fijo que va a tener que cubrir el cliente al principio de un proyecto.

Sin embargo, se debe tener especial cuidado a la hora de elegir entre las diferentes opciones del mercado, puesto que es importante saber si los sistemas automatizados disponen de Business Intelligence, es decir, si tienen la capacidad de generar informes detallados, estadísticas o indicadores para intentar mejorar la productividad dentro del almacén.

Nuestra tecnología AMR proporciona datos en tiempo real a los sistemas internos de la empresa, gracias a los cuales pueden almacenar información muy relevante para su estrategia logística y saber si, por ejemplo, una orden está preparada al 30 al 50 o al 70%, si se ha completado o no la recogida de un artículo, o si se ha terminado el stock. Esto generará a su vez mapas de calor y propuestas de recolocación de los productos a la hora de ser almacenados, teniendo en cuenta a su vez la demanda por parte de los consumidores.

Por suerte, en España, la falta de suelo y los sobrecostes de inversión en tecnología de automatización forman parte del pasado gracias a modelos como RaaS. Por eso se ha convertido en una herramienta fundamental para optimizar el espacio en los procesos logísticos, que permite maximizar el rendimiento y la productividad,  a la vez que se reducen los gastos de inversión inicial y los costes operativos y se mejora considerablemente la experiencia de empleado.