Los beneficios de Blockchain contra el fraude de identidad
En un entorno empresarial competitivo cada vez más digitalizado, el concepto de Blockchain se está asentando como una de las grandes innovaciones tecnológicas de la actualidad.
De hecho, el futuro próximo de esta cadena de bloques es muy positivo, ya que según datos de IDC, se espera que el crecimiento de la inversión en esta tecnología a nivel mundial sea de un 73% cada año, llegando a alcanzar los 11.700 millones de dólares en 2022.
La tecnología Bockchain se aplica a infinidad de sectores, fundamentalmente en el campo de las criptomonedas. Sin embargo, el potencial de desarrollo de esta tecnología hace que su aplicación se expanda a cada vez más ámbitos. En este sentido Vector ITC, consultora tecnológica de capital 100% español, destaca la gestión de la identidad digital como uno de los principales sectores que podría beneficiarse de esta tecnología frente al fraude de identidad en la red.
“2018 ha marcado el inicio de una nueva era en lo relativo a la protección de datos con la llegada y aplicación del nuevo Reglamento General de Protección de Datos”, destaca Iván Lastra, responsable de Blockchain en Vector ITC Group. “En este contexto, los usuarios tienen más control sobre sus datos, aunque todavía existen riesgos latentes, por lo que la aplicación de la tecnología Blockchain para crear una identidad digital ofrece innumerables ventajas en términos de privacidad y seguridad”, añade Lastra.
Procesos que lleva a cabo la tecnología Blockchain
La tecnología Blockchain permite transferir datos digitales mediante un sistema de codificación de información completamente seguro debido, principalmente, a que es un sistema descentralizado (no existe un intermediario que identifique, controle y verifique la información), distribuido (existe una copia de la información en millones de nodos, que además la valida), y a que se aplica la encriptación de la información de manera intrínseca a la propia tecnología. Éste es precisamente uno de los principales beneficios que ofrece a la hora de crear la identidad digital de un usuario. Asimismo, la posibilidad de combinar esta tecnología con otras soluciones de identificación por biometría otorga un multifactor de autenticación sin necesidad de usar claves u otros elementos de seguridad.
Esta combinación, además, permite hacer frente al robo de información, uno de los problemas que más afectan a España según Eurostat, ya que es el quinto país de la Unión Europea con más víctimas afectadas por el robo de identidad. La tecnología Blockchain sirve como una solución de éxito debido a su estructura de funcionamiento dividida en 3 grandes subprocesos:
1. Transacción y verificación de información: cuando se produce un intercambio de datos, en función de los distintos parámetros de las redes, esta transacción de información puede ser verificada de forma instantánea o bien dirigida a una cola de transacciones pendientes de comprobación. En caso de que se llegue a este escenario, los distintos nodos se encargan de determinar la validez de estas transacciones, siendo necesario el consenso para su validación final.
2. Estructura y validación: en un segundo paso, la tecnología Blockchain estructura toda esta información en bloques, los cuáles son identificados con un hash o algoritmo. Esta concatenación de bloques conforma una cadena con altos niveles de seguridad e interdependencia entre los elementos que lo componen, permitiendo la distribución de la información. Sin embargo, antes de ser añadidos a esta cadena, cada bloque debe ser validado por la vía del consenso. Para ello, una de las fórmulas más comunes consiste en que el cliente realice algún tipo de operación con el fin de corroborar la identidad y evitar comportamientos indeseados. Tras esto, finalmente cada nodo añade el bloque en la cadena, que se va distribuyendo a lo largo de la red.
3. Protección. por último, el paso definitivo para la constitución de un elemento seguro consiste en dotar de protección y seguridad a cada elemento de la cadena. Gracias a este proceso, en el caso de que algún actor malicioso intentara alterar, acceder o robar algún elemento de la cadena, el resto de nodos detectarían estos cambios y rechazarían al bloque de la cadena.
Todo este proceso hace que la tecnología Blockchain dote de un nivel extra la seguridad a los datos que se manejan, puesto que la información del usuario está almacenada de forma inmutable. Asimismo, se evita depender de una única aplicación para la verificación de la identidad.
“Con el Blockchain tenemos en nuestras manos una tecnología con un potencial latente de la que aún se puede sacar mucho más rendimiento en un futuro próximo. En nuestro caso, somos pioneros en la creación de metodologías propias para el desarrollo de proyectos Blockchain, caracterizadas por la rapidez, eficiencia, la optimización de costes y el reducido time to market”, concluye Iván Lastra.