Por qué la Inteligencia Artificial requiere de una mayor seguridad
La llegada de la Inteligencia Artificial está transformando sustancialmente los procesos productivos de las organizaciones, como es el caso de la gestión de documentos.
La implementación de las nuevas tecnologías de automatización inteligentes ha convertido la gestión de documentos en una tarea más fácil y rápida, reduciendo los errores manuales, el tiempo y los costes económicos.
Sin embargo, la Inteligencia Artificial no elimina totalmente la probabilidad de que se produzca un fallo de seguridad en estos procesos automatizados. Además, otro factor a tener en cuenta es que la mayoría de organizaciones no considera la seguridad una cuestión prioritaria. De acuerdo a PWC, sólo el 27% de los ejecutivos que ha implementado IA en sus compañías prevé invertir en ciberseguridad en 2018.
En la nueva era digital, las empresas deberían tener en cuenta más que nunca la seguridad. Por ello, Nuance Communications, proveedor líder de soluciones de lenguaje y voz, ha querido explicar cuatro consejos para mejorar la seguridad de los procesos de gestión de documentos:
• Establecer medidas de seguridad acordes a las necesidades y problemas de cada empresa. Ya sea un robot de fábrica o un vehículo autónomo, una de las deficiencias de la Inteligencia Artificial es el sentido común. De ahí la importancia de establecer medidas que eviten la filtración de datos confidenciales de manera accidental en los procesos automáticos de documentos con información confidencial (por ejemplo, información sanitaria privada o de identificación personal). Los responsables de la toma decisiones combinarán funcionalidades para crear soluciones personalizadas acordes a sus necesidades de negocio, abordar problemas comerciales y desarrollar nuevos e innovadores flujos de trabajo.
• Limitar el acceso a usuarios a documentos confidenciales. Acotar quién puede abrir, editar, imprimir o compartir ciertos archivos ayuda a rebajar de forma significativa la posibilidad de una violación accidental de datos. Por ejemplo, las impresoras multifunción (MFP), además de salvaguardar documentos, permiten establecer limitaciones en lo relativo a quién puede o no escanear e imprimir, y que ciertos documentos sean accesibles solo para los usuarios autorizados.
• Realizar un seguimiento en el caso de que suceda un error o filtración. Si se producen filtraciones de datos, las organizaciones deben informar sobre este incidente y hacer un seguimiento de lo ocurrido. Si un proceso automatizado experimenta un error y provoca que un archivo confidencial se haya compartido con usuarios no autorizados, es importante que las empresas realicen una auditoría de estos documentos y archivos electrónicos.
• Abordar la seguridad como una cuestión primordial y compartida entre los empleados. Los responsables de la gestión de la información deben garantizar que se implementan medidas de seguridad adecuadas en los flujos de trabajo automatizados. Si bien la automatización de procesos ofrece importantes beneficios a las organizaciones, la transformación será verdaderamente óptima si la seguridad se convierte en una preocupación compartida entre todos los empleados de la compañía.
La IA permitirá a las empresas de cualquier tamaño desarrollar e implementar flujos de trabajo automatizados para optimizar las tareas de gestión de la información, contar con procesos más eficientes y mejorar la productividad. No obstante, todos estos beneficios perderán su valor si son vulnerables a una violación de seguridad.
