No parece que el dinero digital esté acabando definitivamente con el efectivo…

…al menos de momento

¡Esto marcha! La revolución conspiratoria de los Pulpos en la nube, anunciada en la anterior entrada de este blog, encuentra razones para la esperanza en su resistencia a la transformación digital. Y una demostración está en el uso de dinero físico, como toda la vida, que ahí sigue.

¿Recordáis cuando, hace ya algunos años, nos cuestionábamos, también en una entrada del blog, cómo íbamos a mantener una tradición tan importante como jugar a los chinos si las criptomonedas como el bitcoin acababan sustituyendo a las monedas de verdad? Podéis estar tranquilos, aficionados a ese noble juego, o a otros muchos como el mus, porque las monedicas siguen estando en los bolsillos de mucha gente.

Así que no, no parece que los pagos digitales estén acabando con el dinero en efectivo a la hora de comprar. Como veréis a continuación en un estudio que os mostramos, los porcentajes de uso de monedas y billetes siguen sin ser precisamente marginales, ni mucho menos. Ni Bizum, ni Paypal, ni demás aplicaciones y servicios online para transacciones han acabado con los monederos o billeteras, todavía. Increíblemente, en el mundo siguen existiendo cosas que se pueden ver, tocar, oler y que se ven afectadas por la ley de la gravedad.

No sabemos si, dentro de varios siglos (si el mundo aguanta), las excavaciones arqueológicas pondrán más en valor todavía que ahora el encontrar monedas antiguas (p. ej. “encontrado el último euro acuñado de la historia, de finales del siglo XXI…”), o incluso serán las tarjetas de crédito los objetos exhibidos en museos. Pero hoy por hoy, la revolución digital sigue admitiendo la convivencia con el dinero de siempre. Veremos en el futuro… Hagan apuestas (pero no por Bizum…)

 

Casi el 65% de los españoles sigue usando el efectivo para realizar sus operaciones habituales

En un entorno cada vez más digitalizado, donde los medios de pago digitales han adquirido una relevancia significativa, es importante destacar el valor que presenta el manejo de dinero en efectivo para la sociedad, donde su uso sigue siendo de gran importancia para la mayoría de los españoles. Así lo refleja el II Estudio ‘Percepción y hábitos de los españoles respecto al sector bancario’ llevado a cabo por Nickel, una cuenta alternativa a la banca tradicional.

A pesar de que los métodos de pago digitales o con tarjeta han traído consigo la aparición de cambios en los hábitos de compra de los consumidores, casi dos tercios (64,5%) de los encuestados afirma seguir utilizando el efectivo para realizar sus operaciones habituales, y tan solo uno de cada cuatro (24%) dice utilizar la tarjeta para todo.

La principal razón por la que más del 43% de los españoles siguen prefiriendo el uso de dinero en efectivo es el control de gastos. Al realizar pagos a través de medios digitales somos menos conscientes de cuánto gastamos y el dinero en efectivo nos permite visualizar de manera clara nuestro presupuesto. La privacidad es la segunda ventaja más apreciada: un tercio (32,3%) de los encuestados considera que no tienen por qué compartir con terceros en qué gastan su dinero.

El acceso al efectivo: la asignatura pendiente de la inclusión financiera

Como consecuencia del continuo cierre de sucursales, acceder al dinero en efectivo es cada vez más complicado para gran parte de los españoles, siendo más del 80% de los encuestados los que han acusado esta situación en su zona. Tan sólo el 20% de los españoles confirma que las que tenía en su zona continúan abiertas. Casi 1 de cada 4 españoles se han visto perjudicados por esta situación, el 22%, que reconoce tener que ir en coche o transporte público a la sucursal más cercana.

El uso del efectivo como método de pago en cualquier establecimiento es un derecho garantizado por la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, modificada en 2022 con este fin. Cabe destacar que tras la campaña ‘Soy Mayor, No Idiota’ impulsada por Carlos San Juan, el sector financiero se ha puesto manos a la obra para acordar, entre otras medidas, la mejora del acceso a dinero en efectivo sobre todo para colectivos perjudicados por el cierre de sucursales como las personas mayores o zonas rurales. Sin embargo, ni siquiera 1 de cada 10 encuestados (9,66%) considera que el acceso al dinero en efectivo haya mejorado en las zonas rurales en España en los últimos cinco años.

Según Mónica Correia, CEO de Nickel España: “El dinero en efectivo es un derecho universal y clave en la inclusión financiera que no debería verse vulnerado por ningún tipo de condición como la edad, el cambio tecnológico o la ubicación geográfica”.