El Pulpo no deja de hacer honor al nombre de su blog con lo de la tecnología, pero no siente que sea culpable sino que, como en el chiste del conductor suicida que pensaba que los que iban en sentido contrario eran todos los demás, sigue creyendo que es la masa la que ha sido engañada. Y lo peor de todo es que ahora ya lo ha vivido en sus propias carnes tentaculares.
La cosa es que a nuestra mascota también le tocaba vacunarse, y como al hacer la autocita pensaba que hacía falta un smartphone para recibir por SMS el código QR (no estaba muy bien explicado por Internet), se comió el orgullo y se puso a cambiar la tarjeta SIM de su viejo “down-phone” al teléfono inteligente que tenía guardado en una caja desde hacía meses, fruto de una rocambolesca oferta telefónica. Una vez troquelada la tarjeta y convertida en micro – SIM, ya no había vuelta atrás: El Pulpo estaba smartphonizado por primera vez en su vida, más de una década después de la inmensa mayoría de los mortales.
Todo para que luego el molusco se acabara sumando al lema “emosido engañado”: Primero, al comprobar que el código QR le llegaba por la propia página web de citación (vamos, que lo tenía delante en la pantalla del ordenador). Después, ya en el momento de ir a ser vacunado, cuando enseñó el QR a través de su nuevo cacharro, pero resulta que el escáner no funcionaba, y le acabaron pidiendo el DNI como se habría hecho toda la vida de dios. En definitiva, como bien sabía ya nuestro Pulpo, el smartphone seguía sin ser necesario en su vida… Pero ya no había vuelta atrás, insistimos… Vamos, que sentía que se lo habían colado pero bien, en contra de su voluntad… como al resto de los mortales, vaya… Enhorabuena, gurús de Silicon Valley, vuestro negocio es infalible…
Ahora, nuestro octópodo favorito se lleva todavía menos el móvil a la calle que cuando tenía su viejo cacharrito… porque el nuevo pesa cuatro veces más, casi como en la época de los “troncomóviles” o zaàtófonos de hace 20 años ( a alguien se le olvidó hacer caso a Steve Jobs con lo de que no había que agrandarlos, pero otros piensan que la culpa la tiene el porno online…). Y sigue yendo en el metro sin sacarlo del bolsillo, mientras ve a todos los viajeros ensimismados con los suyos… Antes le daba vergüenza sacar su viejo móvil, no fuera que los nativos digitales se fuesen a desternillar de él en su cara… y ahora le da vergüenza sacar su smartphone delante de sus amigos, pues no cabe duda que la cara de asombro que van a poner todos ellos ante el “milagro” de su conversión tecnológica le estresa más que las burlas de los millennials.
Así pues, cuando el Pulpo lee artículos como el que hoy publicamos más abajo, se indigna aun más, porque ahora que tiene smartphone está todavía más convencido que antes de tenerlo de que no lo necesitaba en absoluto, y mira que ya lo imaginaba, por mucho que sus conocidos le dieran la turra… El mencionado artículo habla de que un ochenta y pico por ciento de la gente literalmente “ama” su móvil… sí, amigos, ya no es utilidad o entretenimiento, es amor… vaya tela… Cuando el Pulpo escuchaba la canción de Queen “I´m in love with my car” pensaba que era sarcástico, burlándose de los friquis de los coches, y luego se enteró, decepcionado, que no, que era literal, y que el compositor Roger Taylor estaba realmente enamorado de su coche… Pues ahora resulta que la pasión tecnológica tiene la misma dirección, sin duda autoparódica a ojos de nuestra mascota. En fin, es lo que hay.
El uso del teléfono móvil aumenta un 90 % en los últimos 10 años en todo el mundo
HMD Global, the home of Nokia phones, ha encargado un estudio a Fly Research sobre el uso de teléfonos móviles en todo el mundo y revela, entre otras cosas, que el 69 % de los encuestados piensa que los smartphones son demasiado caros y el 81 % quiere teléfonos que puedan resistir más y mejor el paso del tiempo.
Según los resultados de este estudio, dependemos tanto de nuestros teléfonos que los tocamos una media de 142 veces al día, pasando 18 horas y 12 minutos a la semana mirando sus pantallas, el equivalente a ver las dos primeras temporadas de Juego de Tronos seguidas. De hecho, España es el país que más tiempo usa el móvil, con 3 horas y 27 minutos al día, mientras que Alemania y Portugal son los que menos, con dos horas diarias.
Stephen Taylor, CMO de HMD Global: "Este informe no sólo pone de manifiesto el amor que la gente tiene por sus teléfonos en todo el mundo, sino también el creciente deseo de contar con un móvil en el que puedan confiar para mantener toda su información a salvo y que puedan conservar durante más tiempo".
El uso del teléfono móvil en todo el mundo ha aumentado un 90 % en los últimos 10 años, y el 83 % afirma "amar" sus smartphones. Este "amor" se ha traducido en que los teléfonos móviles se han convertido en un eje central en todos los aspectos de nuestras vidas: el 37 % utiliza sus teléfonos para comprar; el 76 % para controlar sus finanzas; el 63 %, para hacer ejercicio; mientras que el 68% recurre a su teléfono para realizar transacciones bancarias. Estos son los cinco principales usos que realizamos de nuestros teléfonos móviles en el mundo:
En lo que respecta a la duración de los teléfonos en Europa, la media es que los conservamos dos años y medio antes de cambiarlos. Solo uno de cada tres conserva su teléfono durante más de tres años (27 %). A pesar de ello, el 76 % admite que les gustaría conservarlo durante más tiempo y lo haría (79 %) si los dispositivos mantuvieran su rendimiento a lo largo del tiempo. Además, a uno de cada dos (55 %) le preocupa cómo su constante actualización afecta al medio ambiente, y al 48 % le preocupa el exceso de residuos electrónicos que se producen.
Confianza y seguridad
La confianza es un factor importante a la hora de elegir nuestro móvil: el 79 % de los encuestados afirma que saber que su teléfono es seguro es muy importante para ellos. Más de la mitad (57 %) admite que le preocupa que le estafen, y un sorprendente 17 % dice que ya le han estafado.
A pesar de ello, el 25 % admite que espera al menos dos semanas para descargar las actualizaciones de seguridad, y uno de cada tres (31 %) no sabe si su teléfono cuenta con las últimas actualizaciones de seguridad o no, lo que le hace vulnerable a amenazas y a los ataques de los hackers. El 40 % no descargan las actualizaciones en absoluto creyendo que no sirven de nada.
Estas son las cinco principales razones por las que los europeos no descargan actualizaciones de seguridad:
1. Piensan que no hacen nada (40 %)
2. Les preocupa que se ralentice el teléfono (14 %)
3. Creen que las actualizaciones harán que se quede obsoleto (11 %)
4. Les preocupa que las actualizaciones ocupen demasiado espacio en el teléfono (9 %)
5. Creen que dañan el teléfono (4 %)
En España, preocupados por la seguridad, la durabilidad y el medio ambiente
En España, al 91,2 % de los participantes en el estudio les gustaría poder conservar su smartphone durante más tiempo. De hecho, si pudieran tener un teléfono que conservara la misma duración de la batería y el mismo rendimiento general que cuando lo compraron, el 84,5 % afirma que se plantearía mantenerlo más allá de la duración de su contrato. Y es que, casi el 70 % desearía no tener que cambiar de móvil tan a menudo. Eso sí, casi una cuarta parte de los encuestados confiesa que se le rompen con cierta frecuencia sus teléfonos.
A los españoles no solamente les preocupa la duración de la vida útil de sus teléfonos móviles, sino que también buscan móviles seguros y fiables. Así, el 86,4 % de los participantes en el estudio confiesa estar preocupado por la privacidad en su teléfono móvil. Este punto es una de las principales características en los teléfonos Nokia, que cuentan con tres años de actualizaciones de seguridad mensuales y tres años de actualizaciones del sistema operativo.
Por ello, saber que su teléfono móvil es seguro es importante para los usuarios. Así lo declara un 82,5 % de los encuestados. Este es un tema clave, pues cada vez lo utilizamos para temas en los que la privacidad y seguridad son críticas. El 84,5 % declara haber utilizado su teléfono para realizar gestiones bancarias. Aun así, a un 74,8 % le preocupa poder ser víctima de fraude a través de su móvil. De hecho, el 22,3 % de los encuestados ha sido víctima de un ataque de este tipo.
El cuidado al medio ambiente también es un tema que preocupa a los usuarios en España. Así, el 59,2 por ciento de los participantes realiza el esfuerzo por comprar productos de compañías que se preocupan el medio ambiente y más de la mitad de los usuarios busca activamente compañías que ofrecen propuestas sostenibles en sus productos. Otro tema del que cada vez hay más conciencia entre los consumidores es el de los residuos electrónicos que generamos. Le preocupa al 64,1 por ciento de los encuestados.