La privacidad digital nos pone de los nervios a los españoles más que a cualquier otro país europeo

Y el Pulpo tiene una explicación, y no es tecnológica

Hoy os vamos a ofrecer un estudio de Samsung sobre privacidad digital, en el que se arrojan datos sobre la preocupación de la gente por este asunto, pero sin buscar las causas de por qué en nuestro país es mayor que en el resto de Europa el estrés que nos produce que nuestros datos puedan acabar en manos de otros.

Sin embargo, nuestra querida mascota sí tiene una explicación, y esa explicación que tiene os la va a dar. Y no es una razón de índole estrictamente tecnológica: España es el país de (entre otras muchas cosas) el cotilleo, las viejas del visillo y los correveidiles. Tenemos la mosca detrás de la oreja constantemente por lo que puedan saber o decir de nosotros, porque en pocos lugares en el mundo se practica tanto el chismorreo como aquí.

En ese escenario costumbrista, la llegada de la tecnología, internet, los smartphones y las redes sociales ha potenciado nuestra idiosincrasia murmuradora hasta niveles insospechados. Si además lo unimos a otra característica tradicional de nuestra cultura, la picaresca, entonces tenemos a mucha gente cuyos secretos incluyen cosas que ponen en aprietos a unos cuantos: Conversaciones grabadas con dispositivos móviles que antes no teníamos tan al alcance, y a través de los cuales también vemos, en vivo y en directo, como el corrupto de turno se entera in-situ de que "le han pillao con el carrito del helao"…

En definitiva, que si uno se va a un país en el que la honestidad siga siendo un valor más asentado, con menos ocasiones de sentimiento de vergüenza ajena como el que estamos viviendo estos días, y también con menos obsesión por la vida personal de los demás, es normal que sea menor la preocupación con lo que los riesgos de privacidad digital puedan suponer.

El Pulpo ha hablado. Y ahora ya, os dejamos con los datos del estudio en frío

 

España, líder en estrés digital: el 88% de la Gen Z y Milenials se siente abrumado por la gestión de su privacidad digital

estudio

En plena expansión de la inteligencia artificial y los hogares conectados, la Generación Z y los Milenials se sienten superados por el reto de gestionar su privacidad digital. Según el estudio europeo Privacy is Power impulsado por Samsung, el 88% de los jóvenes de entre 18 y 43 años en España se siente estresado por esta cuestión, la cifra más alta de toda Europa (que se sitúa en un 75%). Es más, casi 9 de cada 10 europeos (88%) se sienten preocupados por su privacidad digital mientras que, en el caso de España, la cifra se eleva al 93%, consolidando así al país como el más preocupado de Europa en esta materia.

A pesar de vivir hiperconectados, muchos jóvenes siguen enfocando su preocupación únicamente en el móvil. El 60% piensa en su privacidad digital diariamente (una cifra que asciende al 49% en Europa), pero el 32% no considera los riesgos de otros dispositivos como televisores, altavoces o electrodomésticos inteligentes, lo que representa una brecha de seguridad en un ecosistema cada vez más integrado (36% en Europa).

Falta de conocimiento y pérdida de control: el dilema digital de una generación

El estudio, realizado entre el 7 y el 24 de abril de 2025 por FleishmanHillard TRUE Global Intelligence y Focaldata, encuestó a más de 8.000 consumidores europeos de entre 18 y 43 años —incluidos más de 1.000 participantes en España— mediante una encuesta online de 15 minutos.

Entre sus conclusiones, destaca que solo el 14% de los jóvenes españoles se considera bien informado sobre cómo se manejan sus datos personales, frente al 13% de la media europea. Esta falta de conocimiento se traduce en inseguridad y pasividad: el 30% acepta las configuraciones por defecto sin comprenderlas, y un 68% cree que jamás podrá tener control completo sobre su privacidad, una percepción más elevada que el 64% registrado a nivel europeo.

Esta percepción también impacta en la innovación: el 20% evita compartir información entre dispositivos conectados por miedo a brechas de seguridad, limitando el acceso a experiencias personalizadas potenciadas por la IA. Sin embargo, el 69% de los españoles, frente al 62% de los europeos, asegura que estaría más dispuesto a adoptar tecnologías con inteligencia artificial si comprendiera mejor sus beneficios y sintiera que sus datos están protegidos.

En definitiva, en España, esta brecha de conocimiento se traduce en una demanda clara: el 75% de los ciudadanos reclama una mejor educación sobre datos y privacidad, superando el 67% del promedio europeo.